La función de “acompañante en parto” es brindar apoyo físico-emocional a la parturienta durante el proceso de alumbramiento y de esta manera reducir considerablemente recuerdos traumáticos del evento. Tal cual lo confirmó la OMS al momento de alumbrar, la mujer que se encuentra acompañada reduce significativamente los dolores de parto, la cesárea y tiende a eliminarse la depresión postparto.
Los antecedentes inmediatos de este proyecto presentado por el Diputado Barrientos, son la Ley 1.040 sancionada en Junio de 2003 por la Ciudad Autónoma de Buenos Aires, siendo la primera legislatura en sancionar una ley en tal sentido.
Por su parte, el Congreso de la Nación tras un intenso debate en Comisión, sanciona la ley 25.929 en Agosto de 2004, conocida como Ley de Parto Humanizado, donde se establece el concepto de acompañante en parto.
“La idea de establecer la figura de acompañante en parto específicamente en una ley, es que sea un complemento de la ley nacional que aporte mayor claridad, y que le brinde a las madres la tranquilidad y el respaldo de que no estarán solas al momento de dar a luz, si así lo desean”, expresó Barrientos.
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