viernes, 25 de noviembre de 2016

Vecino le pide a Daletto, a un concejal y a un cura que cumplan con su palabra


El artesano de la madera, Raúl Márquez, reclamó que el diputado Marcelo Daletto le de una respuesta sobre una obra referida al presidente Mauricio Macri, que le había pedido hace unos meses. También reclamó que un edil de Cambiemos cumpla con una promesa, y que un cura se pronuncie sobre un proyecto.

Márquez junto a un retrato de la gobernadora María Eugenia Vidal que le encargó un particular
"El problema viene desde hace un tiempo -explicó Márquez-. He tenido inconvenientes que nunca me habían pasado. Uno está acostumbrado a la palabra, al trato. En el caso de mis trabajos, cuando son encargados, yo me pongo en movimiento enseguida. Más cuando se trata de una personalidad como un diputado, un ministro, un senador, un intendente. En este caso el problema es con Marcelo Daletto, un hombre con el cual me unía una confianza de muchos años, desde que él estaba con la UCD (Unión del Centro Democrático), 27 o 28 años atrás. Hemos compartido almuerzos y cenas, en el Congreso de la Nación. Me llama poderosamente la atención que no he recibido ninguna noticia de él ni de parte de sus secretarios, que me presentó, para que le hiciera un busto del presidente Macri. Yo le dije que sí. Yo le pregunté si quería un cuadro y él me contestó que no, que quería igual a como hice a (Raúl) Alfonsín, un busto. Le dije que lo íbamos a hacer mejor, con mejores productos, con otra madera, porque se trata de un presidente. Ya he hablado en otros medios y no he recibido ninguna respuesta. Por lo menos, que me diga que está arrepentido. De ninguna parte, ni de sus secretarios ni de él. Entonces, yo ya había hecho un gasto de 14.000 pesos, los trabajos estaban comenzando. Uno ya empieza a cortar, a programar. Cuando empecé a averiguar si me tenía que dirigir a la Cámara de Diputados, a la Cámara de Senadores, o a Marcelo Daletto, ahí recibo la noticia de que nadie me había dado el ok, según él. Pero nadie, después de eso, me vino a decir cómo era la cuestión y que estuviera arrepentido. Uno, por experiencia, sabe que los bustos se hacen después de muertos. En este caso, Macri está vino. No se que destino le iban a dar, si lo iban a colocar en la Casa de Gobierno, en un comité, en la intendencia. A mí no me tocaba. Para la Casa de Gobierno, no, porque tiene que estar fallecido. Me siento mal, defraudado, estafado porque la plata va y viene. Lo que no va y viene es la honestidad. Yo tengo 77 años y sigo manteniendo el trato de palabra".


-¿Cuándo le pidió el trabajo?
-Esto fue este año en exposición de la Sociedad Rural de Chacabuco. Él vino a visitarme y me presentó a los secretarios, Melina Baigorria y Alejandro Cieri. Pero no he recibido nada luego de eso. Ha venido infinidad de veces a Chacabuco y nunca se dignó a llamarme por teléfono, a visitarme a mí casa, a decirme que pasaba algo. Creo que debe estar enterado. Pienso que hay soberbia. Inclusive el presidente del Concejo Deliberante, Jorge Muela, me dijo que me quedara tranquilo que él se iba a poner en comunicación con él y hasta el día de hoy no tengo ninguna noticia.


-¿Está esperando un llamado?
-Estoy esperando. Se jactan de decir la verdad. Su eslogan es decir la verdad. Acá me están faltando a la verdad. Somos pocos en Chacabuco. Soy una persona grande que merezco respeto. Que me diga qué pasó. La plata que gasté no interesa. Eso se arregla. Lo que no pasa es que estuve noches sin dormir pensando en qué iba a hacer.


-¿También tiene un problema vinculado con el monumento a la biblia?
-Hice el águila San Juan con la biblia. Se está esperando para techar el monumento. Tengo otra  promesa, de Lisandro Herrera, quien me dijo que lo diera por hecho que él me iba a hacer el techo. Ojalá que eso se cumpla.


-¿Hace mucho de eso?
-Esto tiene unos años pero con Lisandro Herrera estuvimos acá en el taller y me lo prometió hace dos meses. La palabra se tiene que cumplir. Después, yo lo hago trascender. Puedo decir que ya tengo quien me haga el techo. Si es radical, peronista, socialista, no me importa. Ese monumento necesita un resguardo.


-¿Alguna otra situación?
-Me han pasado muchísimas cosas, como con el enrejado del monumento a San Martín. Me metí en gastos. Tuve que viajar a Rosario.Tuve que viajar a Buenos Aires. Gastar. Perder señas. Nadie me preguntó cuánto había gastado. Retiré los planos del Concejo Deliberante porque terminó la gestión y habían enviado el proyecto a una comisión. Con la Iglesia es otra cosa. El padre (Eduardo) Ceres me llamó hace unos dos años para hacer la reconquista de Cristo, María y San Juan. Yo entré en gastos. Son materiales traídos desde Francia. He perdido la confianza y la garantía de lo que he dado. Me dijo que me lo tenía que pagar Julián Domínguez porque él tiene el contrato. No creo. Pero ya está. Yo quiero los hechos. Que me digan que no alcanza la plata, que lo van a hacer el otro año. Quiero el sí o el no, porque contrató hace dos años, fui a Buenos Aires y Rosario para contactarme con artísticas para conseguir los materiales. En Buenos Aires ya perdí la seña que tuve que dar. Después vienen los problemas en el hogar.

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