lunes, 31 de octubre de 2016

Vecinos de un loteo reclaman las escrituras y dicen que no se iniciaron los trámites

Los habitantes de un barrio que surgió a partir de un loteo están reclamando que se les entreguen las escrituras de los terrenos. Se trata de un emprendimiento inmobiliario ubicado en Avenida Máximo Gil al 1.000, entre el barrio Los Cardales y la quinta del Sindicato de Trabajadores Municipales.
Los vecinos iniciaron el proceso de compra hace 7 años, construyeron pero recientemente se enteraron que los trámites de escrituración no habían sido iniciados. Esto, a pesar de que muchos de ellos terminaron de pagar las correspondientes cuotas.




El loteo surgió de la quinta 909. En junio del 2010, el Concejo Deliberante sancionó una ordenanza, la 5159/10, a través de la cual la incorporó al área urbana, a través de una excepción a la normativa que regula la zonificación según usos de las tierras de Chacabuco. El trámite había sido iniciado por la firma Técnica Nuevos Rumbos SA.
En su momento, este loteo llamó la atención de los ediles de distintos bloques, porque el emprendimiento inmobiliario se iba a subdividir apelando al régimen de Propiedad Horizontal. De esta manera, se podrían obtener terrenos de medidas no convencionales.
Según los vecinos, los lotes tienen 10,75 metros por 17,30 metros. Para el convenio de compra, se tratan de unidades funcionales.
Lo que ocurre 7 años después de haber iniciado el proceso de venta, es que el sector no ha sido urbanizado. Las calles se abrieron de manera irregular y la Municipalidad no realiza trabajos de mantenimiento de las mismas porque para los planos oficiales no existen.
Los vecinos Cristian Caporale, Andrea Carboni, Matías Gómez, Armando Gioia y Sergio Giari, comenzaron a difundir su situación en los medios de comunicación.
Caporale, comentó que “compramos los terrenos por inmobiliaria. Yo compré en lo de Miriam Ricotta, ella (Carboni) a Ortega, y también está Forti. Compramos en el 2008. Todos terminamos de pagar. Fuimos a la Municipalidad a pedir los papeles para hacer la escritura y no los hay. Lamentablemente, no hay nada. Nosotros pedimos la colaboración de la gente. Que nos acompañe en las protestas que podamos hacer. Es la misma ensalada del Tiro Federal, pero con distintos ingredientes. En el Tiro Federal hay lechuga y tomate y esto es cebolla y remolacha”.


-¿Cómo era el acuerdo inicial?
-Era un loteo normal, a 7 años. Cuando ibas por la mitad, podías hacer posesión, y cuando faltaran 10 o 15 cuotas podías escriturar. No había ningún problema. En ningún momento pusieron trabas, pero hoy nos encontramos con que tenemos un problema, porque una traba sería lo de menos. Mandamos cartas documento. Tenemos un abogado que nos está acompañando pero esta gente no da la cara. Hay un pequeño detalle. Nos vendieron con la condición de que teníamos que hacer todas las casas iguales porque corría por cuenta de ellos los planos, la escrituración, para que todo fuera más fácil. Era como un barrio privado. Nos mostraron una maqueta. Nos hicieron un paquete. Nos envolvieron mejor que a un chico. La cuestión es que hicimos todas las casas iguales y no tenemos nada tampoco. Ni alumbrado público. Estamos en el medio de la nada y sin respuesta de nada.

-¿Los lotes se siguen vendiendo?
-Sí, el otro día, vendieron un lote a 150.000 pesos. Se los sacaron a un pobre muchacho que cuando vino a la reunión que hicimos y se enteró, casi se descompone porque ya había puesto la plata.

-¿A ese vecino le dieron libertad para construir?
-Le dijeron que haga la casa que quiera, que no había ningún problema. Es gente que viene entongada con el gobierno anterior. Esperemos que esta gestión la desenmascare como hicieron con el caso del Tiro Federal.
Caporale tiene en su poder un documento que data de febrero de 2011, firmado por una escribana de la ciudad, en la que se deja constancia de que el trámite de escrituración se encontraba en trámite

Conexión al agua corriente. Carboni hace unos meses, tuvo que enviar una carta documento para que se les otorgara una conexión legal a la red de agua potable.
“Nosotros lo compramos hace 7 años -dijo Carboni-. Cuando íbamos y preguntábamos si iba a estar la escritura, nos decían que sí, que no había ningún problema. Al día de hoy, mandamos cartas documento y nada”.

-¿Tuvieron problemas para conseguir la conexión al agua corriente?
-Sí, yo hace cuatro años que reclamaba el agua. Nos decían que iba a pasar. De repente me enteré que tenía que el trámite tenía que pasar por el dueño de la quinta. Mandé una carta documento a Caticha y en 15 días pasó el agua.

-¿El agua no viene a nombre de ustedes?
-Está a nombre de nosotros pero en el recibo de la Municipalidad figura el nombre de Yamila Caticha.

-¿O sea que pagan la tasa…?
-A nombre de otro.

Hubo una reunión. Días atrás, los vecinos lograron organizar una reunión con los titulares de las inmobiliarias que les vendieron los lotes y la escribana que debería intervenir en la escrituración.
Gómez comentó que “mi caso fue parecido al del resto. Quiero la escritura. El otro día hicimos una reunión. Esperábamos que estuviera la escritura, pero no hay.

-¿Qué les dijeron en esa reunión?
-Fuimos todos con la misma idea, por la escritura, amén de todo lo que pasamos, sin agua, estancados, sin luz. No nos dieron una respuesta. Nos dijeron que hay que esperar, esperar y esperar.


Incertidumbre. En el caso de Gioia, la situación le ha generado una deuda bancaria.

-¿Usted tuvo que pedir un crédito para no atrasarse?
-A mí me había nacido la nena sietemesina y me había atrasado en 4 cuotas. Para no deberle a esta gente, saqué un crédito en el banco. Me metí hasta el fondo confiando en que podíamos hacer la escritura y que esto iba a ser nuestro. Al final, estamos en la nada, no tenemos nada. Yo confié en Ortega, que me dijo que la escritura iba a estar pero no hay nada. Yo fui al Municipio y no existimos. Se me cayó la ilusión que tenía de la casa para la familia porque estamos en la nada. Ellos cobraron y a nosotros chau, hasta luego.

Intimado. Por último, en el caso de Giari, lo han intimado.
“Cuando nos enteramos que no había papeles, dejé de pagar -contó-. Entonces, me mandaron una intimación”.

-¿Cuándo empezó a pagar?
-Entre el 2008 y el 2009. Hace 3 años que vivo en el barrio. Cuando fuimos a averiguar por el agua, figurábamos como lote baldío. No estábamos en Catástro. Ahora nosotros tenemos nuestro abogado, quien va a determinar los pasos que tenemos que seguir.

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