Un violento caso se registró en los últimos días en la ciudad de Junín que expone los límites del programa de detención domiciliaria con seguimiento electrónico. La Fiscalía General dio cuenta del avance de la investigación de una denuncia de violenta retención que sufrió una mujer, que además, fue grabada en video.
Por el caso, se detuvo a una mujer llamada Celia Natalia Herrera, de 31 años. La misma se encuentra acusada del delicto de sustracción, retención u ocultamiento durante cerca de 20 horas de una mujer, el pasado 8 de septiembre.
La víctima, llamada Carla Verónica Vidal, denunció que la acusada la hizo ingresar por la fuerza a su domicilio y "la privó de su libertad y la retuvo con la colaboración de otra persona de sexo mascuilino que la amenazaba con un arma de fuego. Le aplicó a la víctima golpes de puño, causándole lesiones en el rostro y le cortó el cabello, al tiempo que continuaba profiriendo amenazas contra la persona de la misma, todo lo cual quedó grabado en un registro fílmico".
Lo grave del caso es que la acusada se encontraba cumpliendo arresto domiciliario bajo monitoreo electrónico, a cargo del Servicio Penitenciario Bonaerense. La condena que pesaba sobre la misma era de 7 años y 6 meses, de los cuales 5 debían ser con prisión efectiva y 3 de manera condicional. La cuestión todavía se debate en la Justicia.
La investigación está a cargo de la fiscal Vanina Lisazo e interviene el Juzgado de Garantías N°2 del Departamento Judicial de Junín.
Ahora, la detenida se encuentra alojada en una dependencia policial, habiéndose solicitado su traslado y alojamiento en la Unidad Penitenciaria con asiento en Batán.
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